¿Sabías que los colores que usamos y nos rodean influyen en cómo nos sentimos? Entérate cómo
ROJO: Es el más caliente de los colores cálidos, presente en la sangre y el fuego. Se relaciona con la pasión, los impulsos, el poder, la vitalidad, la ambición, el amor, la acción, el vigor, la simpatía y la intensidad. Ejerce una influencia poderosa sobre el humor de los seres humanos. Atrae rápidamente la atención, evoca emociones fuertes e incrementa el apetito. Favorece la confianza en sí mismo, el coraje y una actitud optimista ante la vida. Aumenta la tensión muscular, el deseo y la excitación. Activa la circulación y por ende acelera las palpitaciones, eleva la presión arterial y acelera la respiración.Sus influencias negativas implican: expresa rabia, genera actitudes agresivas, despierta la cólera, nos torna irritables, impacientes e inconformistas. Puede afectar el rendimiento al hacer tareas de concentración como resolver exámenes o tomar decisiones, ya que se asocia con el peligro. Si ocupa grandes espacios en una habitación puede resultar agobiante, en cambio si se utiliza en pequeños detalles brinda calidez. Es una buena contraposición a los colores neutros ya que el rojo les da vida.
ROSA: Es un tono femenino que refleja calma, debilidad y tranquilidad. Se relaciona con la limpieza. Tranquiliza y evoca amor y el romance. En tonos oscuros se usa para expresar diversión, emoción, energía y juventud. Es usado en la prevención del cáncer de mama.
AZUL: Color del cielo y el mar, es el más sobrio de los colores fríos y el preferido de los hombres. Transmite seriedad, seguridad, paz, productividad, confianza y tranquilidad. Se le atribuye el poder para desintegrar las energías negativas. Favorece la paciencia, amabilidad y serenidad, aunque la sobreexposición al mismo puede producir fatiga o depresión. Es ideal para el cuarto de los niños ya que ayuda a apaciguar su energía. Se aconseja para balancear el uso de los colores cálidos cuando es usado en la decoración.
VERDE: Color favorito de la naturaleza y sinónimo de esperanza. Es sedante e hipnótico por lo que resulta eficaz en los casos de excitabilidad nerviosa, insomnio y fatiga. Ayuda al reposo, fortifica la vista, simboliza la fecundidad. Inspira paz, frescura, seguridad y esperanza. Induce la paciencia en los hombres. Se asocia a la salud y el dinero. Se utiliza para neutralizar los colores cálidos. Indicado para cualquier ambiente. Es aconsejable tener en el baño toallas o detalles en este color. Los tonos profundos y oscuros evocan abundancia, mientras que los claros calman.
MORADO, PÚRPURA O VIOLETA: Significa lealtad, bienestar, éxito y sabiduría. Ésta es la razón por la que reyes y otros líderes usan atuendos morados. Expande el poder creativo desde cualquier ángulo. Representa el misterio, asociándose con la intuición y la espiritualidad e influenciando emociones y humores. Disminuye la angustia, las fobias y el miedo. También es un color algo melancólico. Una luz color violeta aúna el efecto estimulante del rojo y el tónico del azul. En decoración puede resultar ambiguo e incierto por lo que no es aconsejable pintar el ambiente entero en este color. En cambio, una sola pared puede dar un cambio sorprendente a un ambiente cargado de colores cálidos. En un tono más azulado es ideal para sitios de meditación.
NEGRO: Es la ausencia del color y de toda impresión luminosa. Es lo opuesto a la luz. Se relaciona con la oscuridad, el desespero, el dolor, la formalidad, la elegancia, el poder, la solemnidad, el misterio, el estilo, la tristeza y lo oculto. Para decoración, se debe utilizar en cantidades pequeñas como accesorios, detalles y espacios dónde no se permanezca por mucho tiempo. Si se usa en grandes cantidades puede resultar agobiante
ANARANJADO: Color incandescente, ardiente y brillante. Es sinónimo de entusiasmo, emoción, comunicación, equilibrio, seguridad, confianza, calidez y precaución. Representa lo sociable, impetuoso y amable. Estimula el esparcimiento, la vitalidad, la diversión y el movimiento. Atrae la atención y alegría. Aumenta el optimismo. Por el hecho de ser reconfortante y estimulante puede tanto calmar como irritar. Es propicio para trabajar en equipo, ayuda a la interrelación y la unión. Es ideal para utilizar en lugares dónde la familia se reúne para conversar y disfrutar de la compañía. Debido a su efecto estimulante también se utiliza en los lugares de comidas rápidas, ya que abre el apetito y genera una rápida circulación de público. Recurra a este color si desea quebrar barreras, despertar el entusiasmo interior y divertirse más en la vida.
AMARILLO: Es el color de la luz del sol. Genera calor, provoca el buen humor y la alegría. Es el más sutil de los colores cálidos, actúa como un energizante positivo que no llega a ser agresivo. Está vinculado con la actividad mental y la inspiración creativa ya que despierta el intelecto y actúa como antifatiga. Es muy utilizado en áreas de acceso, salones sociales y cuartos de estudio. Por su característica de "generar calor" es recomendable en climas fríos.
BLANCO: Equivale a la absoluta presencia de luz. Es sinónimo de pureza, inocencia, paz, fe, alegría y pulcritud. Es un color purificador. Brinda sensación de limpieza y claridad. Ayuda a alejarse de lo sombrío y triste. Representa el amor divino. Estimula la humildad y la imaginación creativa. Se puede utilizar en la decoración de un ambiente en grandes cantidades sin sobrecargar el ambiente. Luce moderno y fresco. Es óptimo para que los ambientes luzcan amplios e iluminados. Es ideal para usar en espacios pequeños ya que da una sensación de amplitud. Para los orientales simboliza el más allá o el cambio de vida.
